Irene Sánchez-Escribano no se conforma con una medalla. Quiere el oro. La atleta toledana saldrá este sábado a la pista del Estadio Municipal Joan Serrahima de Barcelona con el objetivo de sentir de nuevo las sensaciones de ser campeona de España de 3.000 obstáculos y poner así la guinda a una temporada excepcional en la que ha cumplido sobradamente las expectativas aunque le queda el Mundial