Francisco J. Rodríguez / Toledo

Suena a tópico, pero es verdad. Es prácticamente imposible poner de acuerdo a políticos de distinto signo. Las posiciones ideológicas parecen imponerse en la mayor parte de los casos frente al entendimiento. Los debates que durante esta legislatura se han dado en la sala de plenos así lo evidencian. Hasta el asunto más mundano y de sentido común ha terminado complicándose en los entresijos de cada ideario político. Tal es así que de 162 mociones presentadas a la cámara parlamentaria municipal por los distintos grupos en estos últimos cuatro años, solo en dos ocasiones se ha producido un frente común unido y uniforme. Un 1,1% de entendimiento total. Tremendo.

Esos dos ‘rara avis’ de la política parlamentaria municipal confluyeron además muy cercanos en el tiempo. Fue en 2017. El primero de ellos en mayo. El grupo Ganemos fue su impulsor y Javier Mateo el encargado de leer la moción, presentada por vez primera en la legislatura por los cuatro partidos políticos (PSOE, Ganemos, PP y Ciudadanos).

La moción reconocía «la relevancia que tiene en la actualidad la Educación Social ante las nuevas formas de exclusión y marginación y los conflictos de convivencia de las sociedades actuales». En ella se instaba al Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad «a la aprobación y desarrollo de una Ley de la Profesión de Educación Social para dotar de una regularización a esta actividad, determinar de manera clara sus límites y responsabilidades y combatir el intrusismo». Nadie tuvo dudas de la importancia de prestar un frente común a la cuestión.

Y es que, aunque pueda parecer que la política municipal debe tener muchos puntos de unión para unos grupos que principalmente tienen que buscar el bien de sus ciudadanos, la realidad dicta que no se tienden esos puentes.

Cuatro meses después de esa alineación cósmica tuvo lugar otro mágico momento. El asunto lo requería. Las cuatro fuerzas políticas con representación municipal volvían a ponerse de acuerdo, esta vez en un tema que atañe de forma directa a la ciudad: el tren de mercancías y la ampliación de los servicios de AVE.

La moción, brillantemente presentada por el PSOE, no tenía pliegues políticos. El resultado fue la adhesión de todos los grupos y la unanimidad de reclamar al Ministerio de Fomento que recupere el tren de mercancías «para fortalecer el desarrollo industrial y logístico de Toledo y acelerar la ampliación de la oferta de destinos de la alta velocidad con el oeste de la península».

Además, la moción recordaba que la inclusión de Toledo en el trazado de la Alta velocidad con destino Extremadura y Portugal mejoraría el número de usuarios de la línea, debido al gran número de turistas que mueve la capital de Castilla-La Mancha. Por último, la moción señalaba que se debían «analizar las opciones de conexión de la LAV Madrid-Extremadura con la red convencional».

Así, PSOE, PP, Ganemos y Ciudadanos no dudaron en apoyar la  propuesta, saliendo adelante por unanimidad un 21 de septiembre de 2017 para marcar el último momento de confluencia política absoluta en el Pleno.

Abarcar las temáticas de cada una de las 162 propuestas daría para varias páginas, pero sí es cierto que existen temas recurrentes a lo largo de la legislatura.

El mejor de ellos es el río Tajo, su defensa y la condena de un trasvase que sigue esquilmando su salud.

La presentación de mociones defendiendo al Tajo ha sido constante. En total, 8 propuestas se han llevado a la cámara local con el río como tema principal. El PSOE ha sido el encargado de presentar seis de ellas. Ganemos ha concurrido en otras dos ocasiones con el Tajo como tema de fondo, aunque esas dos mociones fueron rechazadas al entrar en componentes políticos que rechinaron a sus socios de Gobierno. Versaban sobre el cese del presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), en septiembre de 2017, y sobre el fin de los trasvases y la puesta en marcha de acciones políticas y legales para impedir nuevas derivaciones (septiembre 2018). Esa última coletilla pesó en la salida adelante de la propuesta.

El amianto es otro tema que ha estado presente en estos cuatro años. Salvo Ganemos, todos los demás grupos han presentado mociones relacionadas con el vertido de toneladas de fibrocemento en el barrio del Polígono. Todas han salido adelante con el respaldo de los cuatro partidos, por lo que queda claro que la cuestión es de las que más preocupan en el Ayuntamiento.

Por último, destaca que el PP es el partido, seguido por Ciudadanos, que más cuestiones concretas  lleva al Pleno, como aperturas de edificios públicos y obras muy específicas. Ganemos es, por su parte, el grupo que más mociones presenta relacionadas con temas de índole internacional y de otros lugares de España. Todas ellas con una marcada tendencia social.