Francisco Cerro, arzobispo de corazón
sábado, 29 de febrero de 2020
Madrugó el nuevo arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves para llegar a la ciudad. Todavía en calidad de electo, llegaba a la toledana puerta de Bisagra poco después de las nueve y media de la mañana de este martes, donde lo recibía la alcaldesa, Milagros Tolón.
En el interior del recinto, Cerro Chaves saludó a varios miembros de la Corporación, que lo esperaban bajo mazas, y a un nutrido grupo de fieles, sobre todo miembros de la congregación Catecumenal de Santiago el Mayor, que no pararon de cantar en ningún momento.
Allí Tolón hizo un presente al nuevo Arzobispo, un Toledo de damasquino. Este dirigió sus primeras palabras a la prensa, para mostrar su alegría por volver a la ciudad donde fuera ordenado por don Marcelo en 1981. Apuntó que su intención es continuar con la labor que hasta ahora ha estado desarrollando su amigo Braulio Rodríguez, con el que estuvo desayunando momentos antes.
«Vengo encantado a Toledo, que es mi casa. Después de tantos años aquí, vuelvo al hogar, a mi casa de siempre, muy contento, muy feliz», comenzó a explicar. Estas son las imágenes de una jornada histórica para la archidiócesis.